Miller es un periodista que observa cómo al desembarcar los pasajeros de un avión, éstos comienzan a atacar y a asesinar a todo aquél que se cruza en su camino. Uno podría pensar que se trata de pasajeros de Iberia que han enloquecido ante el anuncio de un nuevo retraso en su vuelo, pero viendo que la película no es española hay que llegar a otra conclusión: son una especie de zombis que necesitan de sangre humana para seguir vivos. El grupo ha sido contaminado por un pasajero que ha estado expuesto a una fuga de radiación en una central nuclear.
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